Una completa agenda invita a entusiasmar a los chicos y demostrar que las ciencias forman parte de nuestras vidas.

Un laboratorio se monta cada día para experimentar sobre Química, arte y arqueología, el mundo prehistórico, genética, ADN e identidad, los colores de la naturaleza, un viaje al interior de nuestro cuerpo, física con onda, y las reacciones químicas. Las demostraciones sobre la relación entre género y ciencia, descubrimientos de virus, arte matemático, tecnología para sanear ríos contaminados, e incluso orígenes y evolución de los X-Men convoca la atención de los más chicos.

Los talleres sobre arqueología, ecotransformación, química, magnetismo, radiaciones, la luz, las bacterias en nuestra alimentación, programación y neurociencias, entre otros, abren las puertas al juego y aprendizaje de los visitantes.

Además, docentes e investigadores dan charlas sobre la física de los superhéroes, estudiar en el Instituto Balseiro y el libro absoluto. Si bien el juego es parte transversal de las propuestas, las partidas de ajedrez simultánea y el Go para estimular el desarrollo del pensamiento lógico son parte de la agenda de actividades que invita el espacio.

“Este es un lugar vivo, al que mucha gente se acerca todos los años para conocer más sobre ciencia y tecnología” cuenta María Cristina Álvarez, a cargo del espacio, y agrega: “Abarcamos todas las ciencias, también las sociales, y motivamos la pregunta en los chicos”.

¿Qué hay en una gota de agua? ¿Cómo está compuesta la luz? ¿Qué tiene mi hamburguesa? son algunas de las preguntas que tal vez disparen la curiosidad y despierten algo más. “A partir de lo visto y experimentado, se forma una inquietud que conduce a buscar  información y tal vez ayude a formar una vocación” comparte entusiasmada Álvarez.

Así sucede con las visitas escolares durante la semana y las familiares los sábados y domingos.

El Equipo de Popularización de la Ciencia de la Facultad de Ciencias Exactas de la UBA, la Universidad Nacional de Cuyo, la Comisión Nacional de Energía Atómica, el Instituto Balseiro, el CONICET y la Fundación Solydeus son las entidades que acompañan la propuesta con sus docentes e investigadores todos los días.

Pasado el horario escolar, en el espacio se desarrolla Zona Docente, cuya programación destinada a docentes aborda la formación, las relaciones en el aula, el bullying, la lectura, la Historia y la Matemática, entre otros temas.